La Policía de la Ciudad realizó un allanamiento para intentar dar con un vecino de Villa Urquiza, prófugo y con una condena por robo, pero no lo encontraron en el domicilio aunque sí a otro, a quien le descubrieron otro delito: los agentes le desmantelaron al inquilino un auténtico vivero de marihuana, con más de 60 plantas de cannabis dentro de un departamento de tres ambientes del edificio, que está frente a un tradicional colegio de la zona.
Cultivo interior, o indoor, como se conoce en la jerga: luminarias de distintos tipos, un sofisticado sistema de ventilación y de conducción de corrientes de aire, otro para medir y controlar factores como la humedad o la temperatura; y 61 plantas de cannabis en todos los estadíos de la vida vegetal: en germinación, en vegetación y en flora.
Instalaciones que los agentes de la Comisaría Vecinal 12C encontraron de casualidad en un departamento del tercer piso de un edificio de Blanco Encalada al 5100, Villa Urquiza, dignas de un profesional (o varios) del cultivo.
La Policía de la Ciudad llegó hasta el domicilio por otra razón: buscaban a un ladrón, condenado por robo a mano armada, y la orden de allanamiento fue expedida por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°9 de la Ciudad. No trascendió la identidad del buscado ni la exactitud de cuál departamento en particular era el que se intentaba allanar, pero sí otros detalles.
—Estoy esperando a que llegue el propietario —les explicó a los agentes el empleado de seguridad del consorcio, el pasado lunes, cuando se presentaron en el edificio. El mismo queda frente a la escuela primaria del Colegio Sagrada Familia, tradicional colegio del barrio porteño.
El mismo vigilante tenía que hacer trabajos de mantenimiento en algunos sensores de humo del departamento en cuestión. Los agentes decidieron aguardar, con el empleado de seguridad, hasta que llegara el propietario, según reconstruyó La Nación.
Sin embargo, quien llegó no era el propietario del inmueble, a quien el TOC N°9 labró una orden de allanamiento y detención, sino al inquilino, un hombre de 31 años.
Y el panorama que observó la Policía de la Ciudad, una vez adentro, constituyó otro delito. En los tres ambientes del departamento se encontraron plantas de cannabis, 61 en total, casi cincuenta más de las que permite el marco legal, que oscila entre 9 y 12, según el programa Reprocann, que busca permitir el cultivo sólo con fines medicinales.
Se detuvo al inquilino, quien acusó tener carnet Reprocann, aunque la plantación encontrada superó holgadamente el límite legal.
A su vez, la Policía de la Ciudad dejó constancia de lo encontrado en dos pasos: primero registró fílmicamente las instalaciones del indoor; luego, subió todas las plantas requisadas a la terraza del edificio, y filmó una postal digna de un parque, por el abundante color verde.
Por tal motivo, los agentes refirieron la cuestión al TOC N°9, institución que ordenó al allanamiento, para dar cuenta de que si bien no lograron encontrar al evadido que se buscaba, encontraron, no obstante, otra actividad ilegal en curso.
Sin embargo, como este delito, el narcomenudeo, tiene jurisdicción federal, debieron comunicarse con el juzgado a cargo de la jueza María Romilda Servini.
Finalmente, el caso recayó en el fuero Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad, que sí investiga temas relacionados a las drogas. En específico, será la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Delitos Vinculados con Estupefacientes (UFEIDE), a cargo de la fiscal Cecilia Amil.
DS