La noticia cayó como una bomba en Río Cuarto, y las esquirlas le pegaron de lleno a la pelota. La detención de Alicio Osvaldo Dagatti, el empresario que las últimas décadas construyó un imperio propio en el Imperio del Sur, no pasó inadvertida para el mundo del fútbol. Desde el 31 de marzo de 2015, ‘El Rey de la Carne’, tal como se lo conoce en todo el sur cordobés, también es amo y señor de la Asociación Atlética Estudiantes, el club más encumbrado de la Capital Alterna de la provincia.
A pesar del estruendo, hay quienes hicieron oídos sordos. “Aclaramos que los trabajadores no fijan la línea editorial del periódico Puntal, ni de canal Qatro, del mismo grupo”, expresó un comunicado de la delegación local del Cispren, el gremio de la prensa y la comunicación, que se solidarizó con los empleados de los medios donde Dagatti es accionista mayoritario.
Allí nada se informó el pasado 4 de diciembre sobre la detención del poderoso y omnipresente dueño de los frigoríficos ‘Livorno’, ‘Transur’ y ‘Arezzo’ (con respectivas sedes en Las Higueras, Alcira Gigena y Río Tercero), cuyas inversiones también se han expandido hacia los rubros ganadero, agricultor, inmobiliario, comercial, deportivo y entretenimiento.
Estudiantes confirmo los retornos de tres futbolistas: el arquero Brian Olivera y los mediocampistas Álvaro Cuello y Alejandro ‘Colo’ Cabrera.
No sólo eso. En las ediciones digitales del periódico y del canal fue desactivada la opción ‘comentarios’, que recepta las opiniones de los lectores. Del tema recién se hicieron eco una semana después, con una entrevista a Matías Pueyrredón, el abogado de la capital cordobesa que defiende al empresario investigado por presunta asociación ilícita.
En el club de la Avenida España también hubo ‘silenzio stampa’. No se emitió comunicado ni declaración alguna sobre la situación del presidente, hombre de contactos estrechos con actores protagónicos de la política local, provincial y nacional, y de relación muy cercana con el titular de la AFA Claudio ‘Chiqui’ Tapia. “Ahí la orden es ‘siga, siga’, como si no hubiera pasado nada”, señalan conocedores del día a día del ‘León’.
Todo queda en familia
Con su máxima autoridad en la cárcel de Bouwer, las riendas de la entidad, al menos en lo formal, pasaron a manos de Federico Ezequiel Dagatti, segundo de los cuatro hijos del mandatario y vicepresidente 1°. “Siempre ha estado más abocado a las cuestiones institucionales y administrativas, y no tanto a los asuntos deportivos”, señalan periodistas de Río Cuarto sobre este directivo.
Más injerencia en las cuestiones futbolísticas le asignan a Alicio Ignacio Dagatti, ‘benjamín’ del mandamás y vocal 1° de la cúpula del Celeste, quien también fue apresado en el marco de la investigación que lleva adelante el fiscal de Delitos Complejos, Enrique Gavier.
En los días previos a la detención de los Dagatti, Estudiantes había informado la contratación de dos futbolistas con pasado en el club: Álvaro Cuello, mediocampista proveniente de Guaraní de Paraguay, y Alejandro ‘Colo’ Cabrera, volante central que viene de vestir la camiseta de Banfield.
El pasado 13 de noviembre, Iván Delfino fue presentado como nuevo entrenador. Es su segundo ciclo en ‘el León del Imperio del Sur’, donde dirigió en 2023.
También se habían echado a rodar los nombres de algunos posibles refuerzos de experiencia, como el lateral Julio Buffarini, los zagueros Alejandro Rébola, Paolo Goltz y Sergio ‘Bocha’ Ojeda, y el arquero Manuel Vicentini, ex Sarmiento de Junín, Belgrano y Colón de Santa Fe.
Otro cuidapalos, Brian Olivera, arregló en las últimas horas su retorno a la entidad, tras su paso por Monagas Sport Club de Venezuela.
“Hay una dirección deportiva que está a cargo de Ariel Dolso, un exfutbolista del club, pero a las decisiones sobre las contrataciones siempre las tomó el presidente”, aseguran en la principal ciudad del sur cordobés. “Esto siempre fue una gestión unipersonal. Todo lo que se hizo en Estudiantes durante los últimos nueve años, pasó por Alicio”, puntualizan.
¿Sigue Delfino?
Aunque el inicio del Campeonato de Primera Nacional 2025 está previsto para la segunda semana de febrero próximo (en los próximos días se haría el sorteo de los grupos), la incertidumbre domina a los hinchas celestes. No sólo respecto al armado del plantel sino también a la situación del entrenador Iván Delfino, quien fue presentado el pasado 13 de noviembre y un día antes de la detención de Dagatti empezó a dirigir la pretemporada.
“El rumor de un posible alejamiento del DT está instalado, pero Delfino no habla con la prensa. Es posible que no quiera quedar ‘pegado’ a esta situación, y también está el tema de que Dagatti es quien le paga el sueldo”, subrayan fuentes cercanas al club riocuartense.
Al respecto, puntualizan: “Si bien es cierto que Estudiantes maneja uno de los presupuestos más bajos de la categoría, el club tiene muy pocos sponsors y los dirigentes ‘dibujan’ un padrón de 3.500 socios. La realidad es que la mayor parte del dinero para bancar la campaña sale del bolsillo del presidente”, precisan.
En las últimas semanas, Dagatti había anunciado en sus redes sociales ‘un proyecto de protagonismo’ para 2025, consecuente con los rumores que circulan en los pasillos de la AFA y que refieren a Estudiantes como ‘el señalado’ para ascender a la Liga Profesional en la siguiente temporada.
En las semanas previas a su detención, Alicio Dagatti anunciaba en sus redes sociales ‘un proyecto de protagonismo’ para Estudiantes en la Primera Nacional 2025.
En la anterior edición de la Primera Nacional, donde el equipo tuvo cinco técnicos diferentes -Gustavo Raggio, Fernando Stagnari, Juan Palandri, Alexis Matteo y Alberto Salomón-, ‘el León’ clasificó 11° de la Zona B con 51 puntos (12 triunfos, 15 empates, 11 derrotas), y quedó al margen de la fase final y también de la siguiente edición de la Copa Argentina.
Ajeno a la novedad judicial que condiciona el devenir institucional y deportivo de Estudiantes, el plantel continúa su rutina de entrenamientos en el Predio Pablo Aimar, sin atención al periodismo.
“El club no informa los horarios de las prácticas y tampoco habilita la posibilidad de que podamos hablar con el cuerpo técnico o los futbolistas. Hay un hermetismo total, está todo blindado”, aseguran comunicadores de diversos medios riocuartenses.