La inteligencia artificial (IA) se convirtió en un tema central de discusión en el ámbito empresarial y tecnológico a nivel mundial, y América latina no es la excepción. Según Lufer Padilla, socio director de IBM Consulting para la región, la IA representa «la oportunidad de la década».
Esta afirmación de este ejecutivo argentino, compartida en una serie de reuniones de prensa realizadas esta semana por IBM en la ciudad de Mendoza, y en las que participó iProfesional, se basa en el potencial transformador que tiene la IA para optimizar procesos, mejorar la productividad y generar nuevas oportunidades laborales.
En el encuentro con periodistas de medios de América latina, voceros de IBM compartieron cómo la IA está cambiando el panorama empresarial en la región, los pronósticos sobre la IA generativa, así como los desafíos éticos y regulatorios que enfrenta esta tecnología.
La inteligencia artificial como motor de cambio
La llegada de la inteligencia artificial es comparada con el impacto que tuvo Internet en las últimas décadas. Padilla señaló que «la IA es un acelerador para repensar los procesos de una manera más inteligente y diferente», permitiendo a las empresas no solo mejorar su eficiencia, sino también innovar en sus productos y servicios.
La adopción de la IA creció significativamente en América latina; un 67% de los profesionales de tecnologías de la información (TI) en la región aceleraron su implementación en los últimos dos años, superando así la media global del 59%, de acuerdo con datos suministrados desde IBM.
La IA generativa, una de las vertientes más avanzadas de esta tecnología, está diseñada para crear contenido nuevo y tomar decisiones autónomas. Se estima que para 2026, el 80% de las empresas grandes habrán integrado soluciones de IA generativa en sus operaciones.
Esta tendencia no solo promete aumentar la productividad empresarial en un 45%, sino que también podría contribuir con más de 16 billones de dólares al PIB mundial para 2030.
Pronósticos sobre la inteligencia artificial generativa
El futuro cercano de la inteligencia artificial se vislumbra lleno de oportunidades. Según Padilla, el año 2024 se centró en aumentar la confianza en las herramientas de IA y establecer programas de gobernanza adecuados.
Para 2025, se espera que las aplicaciones sean «más rentables y eficientes», mientras que hacia 2027 se buscará escalar estas tecnologías a un nivel aún mayor.
En 2029, el foco estará en garantizar la fiabilidad y explicabilidad de los resultados generados por estas herramientas. Finalmente, se anticipa que a partir de 2030 existirá una IA multimodal capaz de interactuar con los usuarios a través de diversos formatos.
Inteligencia artificial y negocios
La inteligencia artificial ya no es vista como una tecnología experimental; su implementación está transformando industrias enteras. En América latina, áreas como marketing y ventas son las más beneficiadas por el uso de IA generativa.
Un estudio compartido por IBM en las reuniones de prensa en Mendoza revela que el 39% de los directores generales ejecutivos consideran que la aplicación de IA es crucial para innovar productos y servicios.
Además, el uso de IA puede mejorar significativamente procesos internos: por ejemplo, se reportó un aumento del 40% en productividad dentro del área de recursos humanos gracias a herramientas automatizadas.
Las empresas están cada vez más dispuestas a asumir riesgos asociados con la adopción de estas tecnologías, siempre que esto les brinde una ventaja competitiva. Sin embargo, también enfrentan desafíos significativos: el 37% de los directores generales ejecutivos mencionó problemas relacionados con productividad y rentabilidad como sus principales preocupaciones.
Lufer Padilla, socio director de IBM Consulting para América latina
Ética y gobernanza
A medida que avanza la adopción de la inteligencia artificial, surgen preocupaciones éticas sobre su uso. Un estudio indica que el 90% de los profesionales de TI en América latina creen que los consumidores prefieren empresas que operan con transparencia respecto a cómo gestionan sus datos e implementan modelos de IA.
La gobernanza adecuada es esencial para construir confianza entre los usuarios y las empresas. Padilla destacó que «las empresas deben considerar la gobernanza de datos como un aspecto central» dentro de su estrategia general sobre inteligencia artificial.
Esto incluye asegurar que los datos utilizados sean gestionados adecuadamente a lo largo del ciclo de vida del proyecto. Las soluciones como watsonx.governance son ejemplos concretos para ayudar a las empresas a cumplir con estos estándares.
La regulación es otro aspecto crucial en el desarrollo responsable de la inteligencia artificial. IBM aboga por una legislación inteligente que regule el riesgo asociado con la IA sin inhibir su innovación. Esto implica regular el uso responsable sin restringir los algoritmos mismos y asegurar que todos los actores involucrados rindan cuentas por sus acciones.
Padilla enfatizó que «la regulación debe tener en cuenta el contexto» en el cual se aplica la IA, lo cual es esencial para mitigar riesgos sin frenar el avance tecnológico.
La inteligencia artificial representa una oportunidad sin precedentes para América latina. Con un enfoque adecuado hacia su implementación ética y regulatoria, esta tecnología puede ser un motor clave para el crecimiento económico y social en la región.
A medida que las empresas continúan adoptando soluciones basadas en inteligencia artificial generativa, será fundamental establecer marcos claros que aseguren su uso responsable y beneficioso.